HECHIZOS PARA EL DÍA DE LAS BRUJAS

Siempre se ha discutido el asunto sobre si las brujas existen o no. Nuestras abuelas decían: Que las hay las hay pero no hay que creer en ellas. Un amigo una vez me invitó a su casa campestre de Robledo en las afueras de Medellín asegurándome que después de la media noche las brujas cruzaban sobre los pinos volando en sus escobas soltando tremendas carcajadas, aunque no creo en las brujas ahora  reconozco que la disculpa que le di entonces era mentirosa, pues la sola posibilidad de ver aquello me espantó.

Alguien me contó que el cerro Nutibara también era uno de los sitios preferidos de las brujas para practicar su vuelo, cosa que me pareció lógica por su cercanía al aeropuerto. Conozco otras historias de personas muy respetables y dignas de toda credibilidad que me han narrado extrañas situaciones que solo pueden atribuirse a las brujas.

Las brujas nos han sido presentadas a través de la historia de diversas maneras, algunas malvadas como la madrastra de Blanca Nieves y otras simpáticas y hermosas como la de Hechizada.

Por ser el mes de octubre una época en la que recordamos al gremio de las brujas quise elaborar esta pequeña nota sobre sus conjuros, pócimas y actividades lúdicas.

CARRERAS DE BABOSAS

Sobre una mesa se pintan con tiza varios carriles con su respectivas marcas de salida y llegada, las brujas participantes deben llevar cada una su babosa debidamente identificada con el número asignado por las organizadoras.

A la cuenta de un, dos tres, por las hojas del ciprés se sueltan las corredoras en la línea de salida y obviamente la ganadora será la que primero cruce la raya de llegada, esta carrera puede durar de varios minutos a varias horas dependiendo del largo de la mesa.

PARA LA MEMORIA

Las brujas suelen tener muy mala memoria por lo que la pócima más usada es la del “Recorderis”, esta es la forma de prepararla:

En una olla grande, preferiblemente ahumada y sucia se echan 10 litros de agua de la quebrada Santa Elena, seguidamente y en este orden se añaden:

30 Patas de grillo Chapulín
5 Huevos güeros
1 Mariposa negra de la mala suerte
5 Kilos de boñiga fresca
20 huevos de rana platanera
1 Libra de basura, (fácil de conseguir en el centro de la ciudad)
3 pelos de gato negro
Se revuelve bien el menjurje y se pone a hervir durante tres horas, luego se deja enfriar y se cuela muy bien.

Entonces la bruja mete la cabeza en la olla y al poco rato comenzará a recordar para que es que sirve el mágico remedio.

PARA HACER QUE VENGA EL SER AMADO

En verdad las brujas no son muy enamoradizas, pero de cuando en cuando le ponen el ojo a algún mozuelo, es cuando recurren a esta pócima:

50 Gramos de miel de avispón verde
20 Gramos de sudor de un alacrán negro, (realmente se requieren muchos bichos de estos y se tarda otro tanto mientras se les hace correr para que suden bastante)
20 Hojas de ortiga
3 Tiras del calzoncillo del ser amado, (esto a veces es difícil pues generalmente la bruja no es muy agraciada y el caballero la mantiene a metros).
1 Foto en blanco y negro del sujeto a enamorar, (hoy día con los móviles modernos es fácil sacarla discretamente).

En un frasco de mermelada sin lavar se echa la miel del avispón y se van agregando los demás componentes revolviéndolos con una varita seca de caña brava.

Ya homogenizado el brebaje se embadurna lentamente el retrato con un pincel de pelos de gato callejero a la luz de una vela negra mientras se recita por seis veces:
Vos que ni me mirás, a mi vendrás.

Puede que no llegue inmediatamente el ser querido, pero si procura siempre estar en su camino puede que luego de dos o tres años la salude, por algo se empieza, es cuestión de perseverar y tener paciencia.

Amigas brujitas, que tengan un fantasmal mes y no se ofendan, esto ha sido solo por diversión pues en verdad las queremos mucho por habernos dado tantas emociones y tantos sustos desde nuestra niñez.

BRUJERÍA
Jhonny Albino y su trio San Juan.