jueves, 12 de septiembre de 2013

ASTROPUERTA SEPTIEMBRE 2013

Hola:

El evento celeste del mes es la danza de la Luna con Spica, Venus y Saturno las noches de los días 8 y 9.

Un artículo sobre la Contaminación Lumínica en .astropuerta www.astropuerta.com
sección Texto de la Semana.
Germán Puerta Restrepo
gpuerta@astropuerta.com.co

Millones de habitantes de la Tierra  han perdido la espectacular vista del cielo que tenían nuestros antepasados durante las noches despejadas. El desarrollo de la luz eléctrica y el aumento de la urbanización han causado un veloz incremento del resplandor sobre pueblos y  ciudades. Como
resultado de esto cada vez menos personas tienen acceso a un cielo puro o incluso medianamente observable, y posiblemente la única experiencia que tendrán en el futuro para conocer las constelaciones o la Vía Láctea sera en el interior de un planetario. Hasta en las zonas rurales, el pésimo diseño de las instalaciones de iluminación oscurecen el esplendor del cielo nocturno.

El resplandor que afecta en forma adversa el ambiente natural se llama contaminación lumínica. La contaminación lumínica tiene su origen en el exceso de luz que no es útil para la iluminación nocturna. Es una luz que se difunde horizontalmente y hacia arriba gracias a luminarias mal diseñadas. Además de opacar las estrellas, el exceso de luz afecta el ritmo circadiano de los seres vivos, incluidos los humanos, o sea, los procesos reproductivos y los cambios metabólicos.
También genera toda clase de riesgos para muchas especies como aves, tortugas marinas, insectos y afecta hasta el crecimiento de las plantas.

La contaminación lumínica significa un desperdicio irracional de recursos energéticos que a su vez incrementan la polución del aire y las emisiones de CO2.

La contaminación lumínica representa un peligro muy especial para la astronomía. Muchas observaciones, incluidas la mayoría de interés cosmológico, pueden realizarse únicamente en cielos
perfectos, pero muchos de los grandes observatorios tradicionales como el Mount Wilson en California están afectados severamente por las luces de los centros urbanos en expansión. Y los aficionados en diversos países tienen cada vez que viajar más lejos para encontrar un cielo decente.

¿Soluciones? Es creciente el número de autoridades públicas que establecen leyes y regulaciones para combatir la contaminación lumínica.

Algunas medida evidentes son:

* Impedir que la luz se emita por encima de la horizontal y dirigirla sólo allí donde es necesaria.

* Emplear de forma generalizada luminarias apantalladas cuyo flujo luminoso se dirija únicamente hacia abajo.

* Usar lámparas de espectro poco contaminante y gran eficiencia energética, preferentemente de vapor de sodio a baja presión (VSBP) o de vapor de sodio a alta presión (VSAP), con una potencia adecuada al uso.
 
* Regular el apagado de iluminaciones ornamentales, monumentales y publicitarias.
* Prohibir los cañones de luz o láser y cualquier proyector que envíe la luz hacia el cielo.

*Reducir el consumo en horas de menor actividad, mediante el empleo de reductores de flujo en la red pública o el apagado selectivo de luminarias.

*Apagar totalmente las luminarias que no sean necesarias.

En todo esto es clave la educación, del público, de los políticos, y de los profesionales del diseño y las instalaciones eléctricas.

Astrónomos y ambientalistas pueden trabajar unidos en la causa de recuperar el cielo nocturno como un patrimonio público.

Ver:
www.darksky.org
www.twanight.org


Enseguida los eventos del mes.
Saludos
Germán Puerta
www.astropuerta.com


Principales eventos celestes de Septiembre 2013

 Jueves 5 - Luna nueva

Domingo 8 - Ocultación de la estrella Spica por la Luna visible en Europa, Norte de Africa y Asia
Ocultación de Venus por la Luna visible en el  Pacífico Sur y en Chile, Argentina y Uruguay

Lunes 9 - Conjunción de Saturno y la Luna

Jueves 12  - Luna en cuarto creciente

Jueves 19 -  Luna llena

Viernes 20 - Conjunción de Venus y Saturno

Domingo 22 - Equinoccio

Viernes 27 - Luna en cuarto menguante

Jueves 29 - Conjunción de Venus y Saturno


Principales efemérides históricas de Septiembre 2013

Domingo 1 - 1979: La nave Pioneer 11 envía las primeras imágenes cercanas de Saturno

Miércoles 11 - 1822: El Santo Oficio en Roma anuncia que las teorías de Copérnico pueden enseñarse libremente

Jueves 12 - 1758: Charles Messier observa la nebulosa del Cangrejo, M1 en su catálogo

Viernes 13 - 1959: Lunik 2, primera nave en impactar otro mundo, la Luna

Sábado 14 - 1769: Nace Alexander von Humboldt

Miércoles 18 - 1980: Arnaldo Tamayo, cubano, primer latinoamericano en el espacio

Sábado 21 - 2003: La nave Galileo entra en la atmósfera de Júpiter

Lunes 23 - 1846: Johann Galle descubre el planeta Neptuno

Lunes 30 - 1880: Primera fotografía de la Nebulosa de Orión

Esta información puede distribuirse libremente.


martes, 10 de septiembre de 2013

HOMENAJE A LA RUANA

SÍMBOLO DE LA PROTESTA CAMPESINA

La ruana es al campesino boyacense lo que el sombrero vueltiao es a los de Sucre y Córdoba.
Han pasado casi treinta años, pero tengo viva en la memoria, como si fuera de esta mañana, la imagen del papa Juan Pablo II celebrando misa solemne en Chiquinquirá con una ruana que le llegaba hasta las rodillas.

Descendiente directa de los amoríos que una capa española mantuvo con un poncho indígena en los altiplanos de Colombia, la ruana es al campesino boyacense lo que el sombrero de vueltas al agricultor de las sabanas que se extienden a lo largo de Córdoba y Sucre: símbolo de su vida y de su tierra, de sus alegrías y penurias, pero también una muestra de su alma.

Esta es la hora en que los historiadores no han podido ponerse de acuerdo: la mitad cree que la ruana consiste, apenas, en una grieta que los indígenas colombianos le hicieron a la capa que los caballeros castellanos usaban para disimular sus travesuras en noches de amantes.

Otros, en cambio, sostienen que no hay ningún parentesco entre las dos y que la ruana es un producto legítimo de la nueva tierra.

No falta quien afirma, con suspiros de nostalgia europea, que el nombre de la ruana se le debe a la ciudad francesa de Rouen (se pronuncia Ruan), de donde en alguna época se importaban paños que aquí convertían en ruanas.

Nada de eso importa porque lo cierto es que la vida se forma así, con pedacitos de aquí y de allá. Lo que importa es saber que, con el paso de los siglos, la ruana se fue convirtiendo en compañera y amiga, cama y chaqueta al mismo tiempo, confidente a la par que consejera, abrigo pero también bolsillo.

Por encima de todo, la ruana se volvió símbolo de la dignidad de los labriegos, como acaba de demostrarlo en los días de la protesta campesina.

De la papa a la yuca

La ruana es a la papa lo mismo que el sombrero de vueltas a la yuca.

El de la ruana no aguantó tanto atropello y salió indignado a los caminos porque le cuesta más producir la papa que venderla. Cultivar un bulto le vale 22.000 pesos. Los bancos lo pelan porque el crédito se Transformó en una usura. Los insumos lo pelan porque aquí se paga por el galón de plaguicida cinco veces más que en la Florida. El camionero lo pela porque la gasolina está casi tan cara como los peajes que paga para transitar por carreteras llenas de derrumbes y huecos. (En Colombia los peajes cuestan como si estuvieran en el camino al cielo.)

Sin embargo, cuando llega a la plaza de mercado, le ofrecen 10.000 pesos por el bulto.

Entonces se encasqueta la ruana dominguera, que es de paño tejido a mano, y entre los dos salen a protestar. Abandona por unos días su tierrita, como llaman bellamente a su terruño, y al cabo de dos semanas de marcha la ruana se impone a los políticos marrulleros que intentaron coquetearle para sacar provecho y a los vándalos profesionales que trataron de suplantarla.

Como si fuera poco, cuando regresa a sus pagos, lo está esperando el de la farmacia del pueblo para que le pague los medicamentos que le dio fiados a precios impagables. Porque si en las ciudades llueve, en los pueblos está cayendo el diluvio: por un frasco de ‘lágrimas naturales’, que en Bogotá cuesta 25.000 pesos, y ya es un abuso, en Choachí, que está apenas a 30 kilómetros de distancia, cobran 45.000.

“Es que el transporte está muy caro”, responde el boticario cuando le hacen el reclamo.

En el otro costado del país, mientras tanto, el del sombrero de vueltas presiente que un día de estos tendrá que botar la yuca en la orilla de la carretera porque el precio que le pagan por una carga tampoco alcanza para pagar los gastos.

Una ruana en Barranquilla

A veces se juntan la yuca y la papa en armoniosa convivencia: por las colinas de Sogamoso vi a un campesino que llevaba puesta su ruana infaltable con un sombrero de vueltas. Debió traérselo de un viaje al mar la hija de su tía Sinforosa, que vive por los lados de Guateque.

Al revés también, porque conozco gentes del Caribe que se ponen su ruana. No son muchos, pero los hay. A mi madre, para no ir muy lejos, le diagnosticaron hipotermia, que es una baja de la temperatura del cuerpo. Los doctores le mandaron terapias sofisticadas y remedios de todos los colores. Nada.

Sentada en su terraza, a las seis de la tarde, cuando la brisa del verano barranquillero soplaba desde el río, lo único que la curaba de aquel frío siberiano era la ruana que su nuera le compró en la plaza mayor de Villa de Leyva. Uno sudaba con solo vérsela puesta.

‘La capa del viejo hidalgo’

Yo, que canto bien, pero se me oye mal, iba una mañana por los corredores de RCN canturreando aquellos versos de Luis Carlos González, el gran poeta de Pereira, que el señor Macías convirtió en un bambuco hermoso:

La capa del viejo hidalgo / se rompe para hacer ruana…

Humberto de la Calle, que es caldense a mucha honra, y del marco de la plaza de Manzanares, para más señas, estaba en la cafetería tomándose un tinto y dio un salto. Casi se atora.

–Para ser ruana –me corrigió–. “Se rompe para ser ruana.” No es un problema de sastrería, sino de ontología.

Salí corriendo a buscar el diccionario. Ontología es la ciencia del ser en general, pero, sobre todo, de la manera como va transformándose hacia categorías superiores. En ese momento entendí. De la Calle tenía toda la razón. No es que a la capa le hayan hecho un roto para volverla ruana; es que el alma del pueblo la fue convirtiendo en ruana. Es cuestión de espíritu, no de hilo y aguja.

El ingeniero Alfredo Cardona Tobón, en su estupenda biografía de la ruana, relata que hace trescientos años, en los pueblos de América, los alcabaleros del rey de España aceptaban mantas de algodón como pago de impuestos. Después las convertían en ruanas colombianas, ponchos chilenos, sarapes mexicanos y muleras en las regiones más calientes. Todos son parientes entre sí. El nombre de ruana, por ejemplo, se usa en Colombia, pero también en Ecuador, Perú, Venezuela y hasta en Uruguay.

La ruana heroica

Al final de la campaña libertadora, Bolívar llevaba puesta una ruana que le regalaron en el pueblo de Socha, donde el cura se puso a recolectar ropa usada para el ejército libertador.

Eran unos llaneros bravos pero harapientos, prácticamente desnudos, a los que el virrey Juan Sámano llamaba “ejército de mendigos”, y que cumplieron la insólita hazaña de subir desde las planicies sofocantes de Arauca hasta demoler a las elegantes tropas españolas donde menos los estaban esperando, entre los cerros helados de Boyacá.

Con la ropita que les regalaron en Socha, algunos de aquellos centauros tan machos y tan peludos tuvieron que ponerse blusas de mujer por una razón aplastante: porque no había más. Ya se imaginarán ustedes las burlas de sus compañeros.

Además, el afortunado que tenía una ruana vieja no la usaba para protegerse del clima, como hubiera sido lo natural, sino para proteger la vida, que era mucho más importante. Envolvía el antebrazo en la ruana para enfrentar los mandobles de espadas y machetes, de modo que la ruana y el brazo le sirvieran de escudo.

Si no pudieron derrotarlos las legiones del rey de España, ¿ustedes creen que los descendientes de aquellos hombres van a permitir que los maten de hambre unos vendedores de insecticidas?

Adivinanzas y refranes

Las leyendas populares han hecho de la ruana protagonista de historias y bromas interminables. Los artesanos de Nobsa, en la parte alta del río Chicamocha, se divierten contándole al viajero esta adivinanza:

–Grande, peluda y en el centro una rajadura. ¿Qué es?

Cuando el visitante empieza a sonrojarse, ellos le dan la solución.

–La ruana –gritan, y sueltan la carcajada.

La ruana es una referencia constante en proverbios y refranes. Ya usted sabe lo que significa ponerse a alguien o a algo de ruana.

“Por debajo de la ruana” es sinónimo de trampa, de lo que se hace mañosamente, a escondidas, como ciertos contratos de obras públicas. El peso de la ley sigue siendo solo para los de ruana. En las grandes ciudades llaman “ruanetas”, con desprecio, a la gente del pueblo. En tierras de Antioquia y de las regiones paisas, cuando alguien dice que el hábito no hace al monje, la gente le añade: “Ni la ruana al arriero ni el vestido al caballero”.

Epílogo

En el edificio de la gobernación de Boyacá, el día en que los manifestantes y el Gobierno se sentaron a dialogar, un dirigente de los campesinos, llamado César Pachón, les dijo al ministro del Interior y al de Agricultura:

–Nosotros no pedimos subsidios. Tampoco queremos limosnas. Lo único que estamos pidiendo es que nuestro trabajo se pague con justicia.

Este país será distinto cuando la gente sienta que puede reclamar sus derechos sin miedo y sin destruir con vandalismo lo poco que tenemos.

Cuando la ruana y el sombrero de vueltas se encuentren en un recodo del camino y se den el abrazo que se están debiendo desde hace tanto tiempo. Espero estar vivo para verlo.

JUAN GOSSAÍN
Especial para EL TIEMPO



domingo, 8 de septiembre de 2013

JUDAS

Alberto López nos sigue sorprendiendo con sus escritos en Facebook. Ahora publica un texto sobre Judas y su verdadero  papel en el grupo de los doce apóstoles develando detalles con su original estilo literario donde uno no sabe dónde termina la realidad y comienza la fantasía. Como el mismo dice en uno de sus comentarios al margen del texto: “Está bastante claro que es un texto de creación y ficción... ni siquiera un ensayo... se aproxima más a un cuento”.

Sus apreciaciones de seguro lo hubiesen llevado a la hoguera o al potro de los tormentos de haber sido lanzadas en el siglo XIII, cuando la Sagrada Inquisición ejercía su tenebroso poder.

Su historia no deja de tener mucho arraigo histórico, aún más ahora que tanto se habla de unos papiros que permanecieron ocultos en el interior de una cueva a orillas del río Nilo en las afueras de El Minya en Egipto por más de 1.700 años y que al ser descubiertos por un nativo buscador de tesoros causaron revuelo entre los arqueólogos y teólogos pues resultaron ser después de traducidos y analizados, casi con toda certeza, fragmentos del evangelio de Judas.

Esta publicación de Alberto de inmediato causó algunos fuertes comentarios entre ellos uno que lo tildaba de haberla escrito inspirado por Lucifer y, por ende ser candidato seguro para arder en el mismísimo infierno, de la noche a la mañana  entraba a la lista de los autores malditos. Al final del texto publicamos algunos de estos comentarios al igual que las respuestas del  escritor que son bien interesantes.

Sin más veamos el texto no sin antes agradecer de nuevo a Alberto López su deferencia al compartirlo a través de este blog.


JUDAS

El personaje de Judas Iscariote, el apóstol del que apenas se habla, a no ser para denostarlo como alevoso y traidor, ha tenido siempre, para mí, no sé porque, una atracción especial. Quizás se deba, a mi inclinación natural por los perdedores.

El grupo de Jesús y sus apóstoles, no ha sido analizado, que yo sepa, como lobby o grupo con voluntad de dominio y poder, en el diverso conjunto de grupos judíos que se oponían, o luchaban desde la resistencia activa o pasiva, contra el poder imperial de Roma. Como en todo partido, debían darse en su interior, múltiples enfrentamientos, intrigas y luchas por la hegemonía, dadas las personalidades tan diversas que lo componían. Hegemonía que pasaba por ir ganando la proximidad y el favor de Jesús, quien, apoyándose en un lenguaje críptico plagado de segundas explicaciones, sabía, como líder inteligente, distribuir jerarquías y mantener el equilibrio entre los componentes del grupo.

De la personalidad de Judas nos ha llegado poco. La historia oficial lo presenta como traidor, envidioso y finalmente suicida, víctima, se dice, de sus propios remordimientos por la venta del maestro. La llamada Historia Sagrada, la de los Evangelios Canónicos, nos dice que era el tesorero del grupo, dejando deslizar arteramente una excesiva atracción por el dinero, que lo llevaría al pecado de la codicia, con la venta final del maestro por las dichosas treinta monedas. Una historia ésta, creada por la Iglesia Romana, para ilustrar a los espíritus infantiles de las primeras masas pobres e ignorantes que se apuntaron al partido cristiano, y que hoy, resulta no solo increíble si no que poco menos que ridícula. Aunque más ridículo resulta seguir manteniéndola como hace todavía la Iglesia, aunque bien es verdad que, en los últimos tiempos, acudiendo a la interpretación metafórica, como también ha hecho con el Diluvio Universal, La Creación del Mundo en siete días y tantos mitos más.

El asunto de esta compra venta, a pesar de su popularidad por la machacona interpretación de la Iglesia, no ha tenido entre la gente informada demasiada verosimilitud. De Quincey en 1.857, rebatiendo esta doctrina digamos oficial, decía que “no una cosa, sino todas las cosas que la tradición atribuye a Judas Iscariote son falsas”. De Quincey sugería que con la entrega de Jesús, Judas, con la lógica de un político revolucionario, pretendía que el nazareno declarara públicamente su divinidad, levantando así en armas al pueblo judío contra Roma. Es decir que el hijo del carpintero se declarara públicamente como Mesías. Y es que, Judas, estaba convencido, como ninguno otro de los seguidores de Jesús, que éste era el Mesías Divino.

Judas, efectivamente era el tesorero, pero no lo era por codicia como se ha dicho, sino porque era el único del grupo que tenía los conocimientos, la formación y la cultura para poder serlo. Frente al resto de sus compañeros, hombres sencillos, rudos, ignorantes, incluso muy humildes, como es el caso de los pescadores, el apóstol innombrable sería, en términos actuales, el intelectual, que debió tener evidentes dificultados de convivencia dentro de aquél grupo, cuyo seguimiento y fidelidad a Jesús, estaba por encima de cualquier lógica o razonamiento personal, hasta el punto de que, con la excepción de Judas, la capacidad de autocrítica dentro del grupo, era prácticamente inexistente.

La anulación de la personalidad y el abandono de la historia anterior de cada uno, era condición imprescindible para pertenecer al selecto grupo que seguía al Maestro, y esto, en Judas, tuvo que producir un gran desgarro interior, entre la obediencia ciega y el pensamiento libre, que se culminaría con su propia muerte.

El Nazareno se supo rodear de hombres en los que primaba la fidelidad, la entrega, incluso la tozudez, por encima de la inteligencia. El mensaje que tendrían que transmitir así lo requeriría. Un mensaje sencillo y fundamentalista, que no estaba dirigido a las gentes cultivadas, sino a las multitudes ignorantes, humildes, temerosas e iletradas. Un mensaje y una manera de trasmitirlo, que recuerda al que desarrollará más tarde el Islam, apoyándose en unas masas de ignorantes pastores que, saldrán del desierto para predicar la buena nueva. Frente a aquél público, Judas tendría evidentes problemas para dirigir su discurso. Y otro tanto le pasaría en el futuro partido cristiano, donde la inteligencia reflexiva y crítica de los artistas y los intelectuales, tenía difícil cabida. Así su rol se vería degradado y reducido a un papel puramente instrumental, condicionado por la coyuntura y necesidades políticas del momento.

En realidad, la labor de Judas dentro del partido, iba mucho más allá que la puramente administrativa y financiera. Consistía en la llevanza del aparato, de la logística y de la intendencia del grupo, así como en las relaciones con otros grupos que luchaban contra Roma y su organización de poder instituida con la colaboración de la aristocracia, los comerciantes y los sacerdotes del templo. Por ejemplo, Judas será el interlocutor con Barrabás y los Celotes, quienes estaban propugnando el levantamiento armado. El resto del grupo vivía como en las nubes, alejado de los problemas del día a día y de la realidad, obnubilados por la personalidad y ocurrencias del maestro, quien confiaba en que el Padre proveería de la misma manera que lo hacía con los pajarillos del campo. Pero quien en verdad proveía era Judas, que se las veía negras para encontrar comida para las masas de desarrapados que, acudían a un mitin a orillas del lago Tiberíades o para solucionar la falta de vino en los esponsales de Jesús con María de Magdala. La verdad es que, a Judas, estos asuntos le tenían que producir verdadera frustración, pues ante la ineptitud de sus compañeros que, solo conseguían unos pocos panes y peces para dar de comer a cuatro mil asistentes, él cargaba a sus espaldas la responsabilidad de resolverlos, y además, desde la total discreción, a fin de que el tanto del milagro ante las masas se lo apuntara el jefe, esto es el Nazareno.

Pero aun así, Jesús, como buen judío astuto y receloso, nunca depositó su total confianza en Judas, en su entrega acrítica y total a la causa, por lo que siempre lo mantuvo en un segundo plano, que desde la óptica del apóstol, resultaba inexplicable e injusto. Así que Judas, nunca acabó del todo de pertenecer a la cúpula del aparato del partido. El Maestro quería hombres que sintieran, no hombres que pensaran, pues sabía que el conocimiento y la imaginación son factores que hacen inseguro al hombre y producen un cierto tipo de cobardía, el de la duda. Por eso, para el mando del futuro partido cristiano escogería a Pedro. Fuerte, decidido, empecinado, violento, no muy inteligente, pero con esquemas sencillos y claros, era el hombre adecuado para llevar hasta el final y a costa de su inmolación, el mensaje de su Maestro. Juan, débil, frágil, siempre a la vera del Maestro, siempre buscando su protección era un joven sin el valor necesario para reconocer su condición homosexual y su perdido enamoramiento de Jesús. El resto de los compañeros de viaje, hombres sencillos, que en su deslumbramiento por la palabra y los hechos sorprendentes del Maestro, se dejaban conducir a cualquier parte, viviendo la vida que para cada uno de ellos aquel designase.

Judas por el contrario, se movía entre la duda y la admiración por Jesús. Como otros grandes malditos, sentía que, valía más pensar que vivir. En aquél grupo, estaba condenado a ser un extraño. Orgulloso, solitario y melancólico, consciente de su irreductible diferencia social, acabaría siendo precisamente por ello, como buen hijo de Saturno, su propia víctima.

La muerte de Judas, no se puede entender como vulgarmente se afirma, como un acto de cobardía. Morir solo, no es de cobardes, sino de solitarios. A diferencia de otros compañeros que, se dejaron matar o convirtieron su muerte en un espectáculo, para dar a las gentes testimonio del empecinamiento en su fe, Judas se ahorcó solo y alejado de todos en el campo del alfarero, en un acto de humildad y humanidad, sin otro parangón que con la propia muerte del crucificado.

Cuando Jesús murió, todos, incluido Pedro, dudaron de la divinidad del Maestro, de su palabra y de sus milagros. Pensando que se habían equivocado, se encerraron acobardados tras gruesas paredes en un cenáculo permanente, sin ninguna capacidad de reacción. En aquellos momentos de desconcierto, solo quedó, como testimonio del convencimiento en la divinidad de Cristo, el suicidio de un hombre, de Judas, que ante el inmenso sacrificio del Dios-Hombre no se creyó a sí mismo, como dirá Borges, ni digno de ser bueno.

Todas las historias, pero especialmente la del cristianismo, contada por la Iglesia Católica, están construidas tanto de recuerdos como de olvidos. De un gran recuerdo, mixtificado hasta hacerlo irreconocible, el de Jesús, y de un atronador olvido, el de Judas Iscariote, el traidor.

Con la crucifixión del Maestro y la muerte de Judas, el partido del Nazareno, una vez constatado su fracaso, prácticamente se disolverá. Juan, tan proclive al misticismo, acabaría creando en Éfeso su propio grupo, con su propia cruzada, como una secta más entre las múltiples sectas en que se dividirá inicialmente el cristianismo. Acabará ofreciendo una visión tan particular del destino cristiano que, su evangelio, tiene difícil encaje con los de los demás evangelistas. A pesar de su influencia en los primeros años, su críptico mensaje se acabará diluyendo, como el de tantas otras sectas cristianas, con el paso del tiempo.

En aquel desconcierto de los primeros años, aparecerá al final de la vida de Pedro (quien nunca saldrá de los límites del judaísmo) un personaje, Pablo, quien con su formación greco-latina, será el que rompa con el marco judaizante en el que se constriñe el primer cristianismo, para abrirse a los gentiles. Pablo de Tarso, el nuevo líder político de los judíos cristianos, sabrá ver que si el partido no se convertía en un partido de masas, en una internacional cristiana, estaba abocado a convertirse en una secta fundamentalista más del judaísmo, cuyo futuro sería desangrarse en luchas intestinas con otros grupos. Así que Pablo el implacable e intransigente perseguidor de los cristianos, se acabará convirtiendo en el primer propagandista de la nueva fe, poniendo sus indudables capacidades organizativas, al servicio de su nuevo partido, hasta el punto de pasar sin reservas, al territorio de los perseguidos.

El será quien imprima al cristianismo ese principio expansivo y de conquista que está en sus propios fundamentos programáticos y que ha llegado hasta hoy. Un principio y un programa, que requerirá de la organización y especialización de funciones, responsabilidades y jerarquías propias de un gran aparato político que, se concretará finalmente en la creación de La Iglesia. Una organización con voluntad imperial que, para algunos, como Ignacio de Loyola, se acerca a la organización de un ejército en línea de combate. Un aparato que por su innata voluntad de crecer y expandir su doctrina, ya canónica, le llevará a entrar en las miserias del mundo del poder y de la política, pactando alianzas con los poderosos de turno, a quienes legitimará a cambio de verse reconocida como religión oficial. Así Pablo, el perseguido, acabará enseñado a sus sucesores como pasar de perseguidos a perseguidores.

El camino abierto por el Nazareno dando ejemplo de una doctrina de la no violencia, hasta el punto de ofrecer su propia muerte, antes de caer en la humana tentación violenta de rebelarse, solo se mantendrá durante unos pocos años. Con el transcurso del tiempo, su testimonio se desvanecerá. Los que estuvieron a su lado irán desapareciendo, y a los que vendrán detrás, se les hará demasiado duro estar poniendo siempre la otra mejilla y sufrir en la oposición a contra corriente. El paso de una situación sectaria a una de masas, es el paso de las creencias personales, a la religión como institución. El paso de un grupo de humildes perdedores semiclandestinos, a una corporación ganadora y triunfante.

Parece cuando menos obligado preguntarse, el porqué de la traición de Judas, si tal traición existió, y si no fue así, por qué motivo se difundió tamaña leyenda difamatoria sobre su figura, máxime cuando en su vida anterior con Jesús, nunca apuntó el más mínimo desafecto hacia el Nazareno.

La traición de Judas y su comportamiento resulta para el sentido común, algo totalmente inexplicable, que suena a disparate clamoroso recogido en la historia oficial, una historia no lo olvidemos, que fue escrita por sus propios compañeros tras su desaparición. La cobardía mostrada por los apóstoles en la detención, proceso y muerte de Jesús, bien pudo haber dado pie a éstos para encubrirla, mediante la formulación de una falsa acusación contra aquél compañero que, hasta el final, se mantuvo fiel al Maestro, y al que por sus conocimientos, cultura y posición, siempre habían considerado un extraño.

La institucionalización de las doctrinas de Jesús en religión oficial, el paso de los cristianos peregrinos para dar testimonio de sus creencias a batallar para imponer estas, representó una transformación tan profunda de las ideas del Rabino que, en cuanto a su contenido filosófico, ético y moral, se puede hablar de dos cristianismos, que entre sí, presentan muy pocas coincidencias.

La vergüenza de Judas por verse incapaz de defender a su maestro, su error por no calibrar que Jesús llevaría hasta sus últimas consecuencias, sin rebelarse, sus ideas, es lo que le llevó al suicidio como acto de contrición y solidaridad con su maestro. Todos los demás, Pedro incluido, se ocultarán cobardemente. Su vergüenza no les impedía seguir viviendo y su escasa decisión y voluntad les llevaría a acusar a Judas con una burda difamación.

Esta inacción, en que el grupo de apóstoles se sumió después de la muerte del Maestro, habría continuado hasta convertirse en un grupúsculo marginal, si no hubiera sido por la intervención de Pablo, un extraño al grupo inicial de fundadores, que pasando por encima de estos (tuvo sus más y sus menos en el llamado primer Concilio de Jerusalém, con Pedro al no compartir éste la idea de abrir el mensaje de Cristo a los gentiles) renovaría el partido sacándolo de su misticismo sectario y paralizante.

Sobre la muerte e ignominia del único justo, del único santo de entre los apóstoles que no está en el santoral, se construirá el nuevo partido cristiano, que solo mantendrá de la doctrina del Nazareno, su nombre y el icono de su imagen crucificada como bandera.

LA POLÉMICA.
(Pego los textos tal cual aparecieron el la página de Alberto López)

CARMEN: ¿Quién puede aseverar o negar toda tu argumentación en defensa de Judas Iscariote? Es una cuestión de fe. No se puede saber con toda la tecnología que se cuenta actualmente, quién es el asesino en un crimen y tú pretendes distorsionar lo que por más de 20 siglos se sostuvo. Eres dueño de hacerlo... sin embargo lo que sostienes en este extenso texto es un dislate sin fuentes fidedignas, sin rigor científico... sólo una sospecha o una provocación literaria para que te comenten.

ALBERTO: Chica no sé porque te enfadas... esto solo es solo literatura... está bastante claro que es un texto de creación y ficción... ni siquiera un ensayo... se aproxima más a un cuento y si has leído algunas de las cosas de las que escribo, veras que es así... de todas maneras eres muy libre de pensar lo que quieras... y yo de escribir lo que se me ocurra y por descontado puedes no leerme... en cualquier caso te mando un saludo afectuoso... y gracias por leerme... Alberto.

ARNULFO: Creo que escribiste este relato con una franca inspiración diabólica. Solamente, con lo que dices de Juan, tu alma se va al infierno. Nada más inexacto en toda tu versión. Y si haces literatura  difamando al hijo de Dios y a sus apóstoles y rescatando a un caído, no faltará el incauto e inculto que te crea. Pero te acompañará al infierno. ¡Pobre de ti!

ALBERTO: La verdad Arnulfo, no sé qué contestarte... he dudado si hacerlo, pero te voy a contestar... podría recordarte que ya no hay Inquisición, pero supongo que lo sabes... que el Papa (el anterior, el alemán de las SS)* ya dijo que no hay infierno, pero supongo que lo sabes... que hay una cosa que se llama libertad de expresión... no sé si lo sabes... en fin te diría tantas cosas, como que no creo en el alma, pero si en las personas y no les recrimino por lo que piensan... que tampoco existe el diablo o sea que no creo que como tú dices me haya inspirado o dirigido mi mano sobre el teclado... que más... que más... ah¡ que no creo que los que lean estos textos, según tú irreverentes, vayan al infierno porque yo al lado de otros escritores mucho más famosos que yo en ideas critico-religiosas soy casi una monja... que más ...que más... si, te recomendaría un texto del gran Borges, sobre Judas donde también reivindica al que tu llamas el caído... por cierto a mi me parece mucho más cristiano estar con un apóstol caído, como Judas que, con un bruto como Pedro, que en lugar de poner la otra mejilla, saco la espada y desorejo a un soldado, que seguramente era un pobre mandado con un sueldo de mierda... ¡ah¡ si ¡ lo de la homosexualidad de Juan... chico a mí en los cuadros, ya desde el Renacimiento, es la sensación que me da, que quieres que te diga... tendrías que pedir explicaciones a quienes pintaron los cuadros... además ¿qué problema tienes con los homosexuales?... ah¡ claro, igual piensas que los maricones no pueden ir al cielo... mira yo ni soy maricón ni creo en el cielo, pero teniendo en cuenta lo que esta gente ha pasado en la tierra yo pienso que son los que más lo tienen ganado... por cierto no sé si sabes que como dice una canción de la Otxoa (una cantante vasca) ser maricón ya no es pecado... bueno eso lo dice ya hasta el Papa Francisco... aunque claro quizás para ti el argentino también se está ganado el infierno con las ultimas cosas que está diciendo... no sé... además yo solo soy un escritor pequeñito y esto que he escrito sobre Judas solo es un ensayo de ficción que no tiene ninguna importancia ni pretende dar ejemplo ni testimonio de nada... en fin que solo es literatura... y si te ha molestado, pues lo siento... a mí sin embargo, no me ha molestado que me indiques la autopista para el infierno, pienso que estás en tu derecho de decírmelo, lo mismo que yo en no hacerte caso.. por eso no nos vamos a pelear... o sea que sin acritud te ofrezco mi mano, te deseo buenas noches y que duermas con los angelitos.... Ah... que para mí tampoco los hay... un saludo (de verdad)... Alberto López.
* (Creo que Alberto se refiere es a Juan Pablo II)

lunes, 2 de septiembre de 2013

EL CEMENTERIO UNIVERSAL

Nos comparten desde Barranquilla este excelente texto.
(Alberto Buelvas Castro )

Cementerio Universal de Barranquilla
He ido varias veces al Cementerio Universal, pero en son de paseo.
Me gusta el silencio, que muchas veces es interrumpido por sollozos casi inaudibles de dolientes de muertos que se fueron hace tiempo o por los gritos lastimeros que expelen los deudos de los finados recién llegados. A veces me pongo a pensar que la intensidad del dolor expresado está relacionada con la fecha del deceso.


He encontrado historias de muertos que siguen dando de que hablar, incluso desde el más allá. También están los rezanderos, que ávidos por ganarse un dinero con su rebusque, se abalanzan sobre el cortejo fúnebre del nuevo huésped, éstos de inmediato entonan cánticos y rezos que hacen mejor que cualquier cura, tienen facultades histriónicas pues dejan ver cierto dolor y familiaridad con el finado cuando mencionan el nombre completo, nombre que han tomado de la cinta que va en la carroza fúnebre. 

La gente por lo regular es católica, por ello obedeciendo a una costumbre impuesta “paran oreja" a los rezos y dejando de lado su dolor responden como entes, de forma automática y al unísono las oraciones recitadas para que el alma de Fulano alcance la paz y con ello la vida eterna.
En la medida que el ataúd va entrando en el cilindro –bóveda- los “ayayais” son mayores. Se escucha el raspar de la madera del ataúd con el piso de la bóveda y luego un “tum” -sonido seco- que indica que ha llegado al tope; pide entonces el sepulturero a su ayudante la tapa de concreto burdo, la acomoda y con la habilidad que le ha dado el desempeño diario de su labor, sella con mortero de mala calidad las hendijas. Y de forma más bien cují* pone algunas palustradas de esa mezcla pobre sobre la tapa de concreto y le da un medio resane; en ese cemento fresco inscribe el nombre del difunto, la fecha y un número. Siempre tenemos un número que nos acompaña desde que nacemos hasta el momento que morimos.


Sigo paseando por el cementerio, al que llaman “campo santo”, pero que de campo no tiene casi nada y de santo le veo muy poco, más cuando veo grabados en el mármol con ostentosa caligrafía apellidos y nombres de algunos que llegaron allí precisamente por no ser tan santos, casi siempre alcanzados por varias balas que salían de policías o de amigos con los que han tenido un pleito, y los pleitos entre ellos se arreglan a tiros. Sigo mi periplo, en la medida de mi avance colecciono en mi memoria nombres curiosos de algunos que nunca tuvieron tocayos. Hoy los he olvidado, soy malo para recordar nombres incluso de los vivos.
Sigo rodando, veo alguna vegetación casi toda florecida, principalmente las acacias de flores rojas, pienso y sé que el humus es lo que sobra en ese lugar, hay ardillas, lobos de rabos mienta madre, lobos polleros, camaleones pequeños que no sé si son una visión o se camuflaron, también iguanas pequeñas. Entre la hierba hay montoncitos de tierra que parecen hechos con un molde, son el avizor de que hay lombrices de tierra. Busco la salida, ansioso de ver el ajetreo de los vivos y dejando atrás la aparente tranquilidad de los muertos.


Afuera, están los vendedores de flores. Ahora venden flores de plástico o sintéticas, de las que se les muere el color con la inclemencia del tiempo, también las hay naturales, pero en menor proporción. 

Llegan los deudos que se bajan de un carro de reciente modelo, bueno lo digo por el aspecto del carro, y lo dejan al cuidado de un hombre que bambolea una bayeta roja - dulce abrigo - y como quién compra algo ilícito, se acercan con sigilo al vendedor de flores, regatean el precio llegan a un acuerdo, pagan e ingresan. Todos llevan gafas oscuras y van bien vestidos, pienso que es un muerto reciente y vienen a dar las gracias por la herencia que les dejó. Por que con ese calor que hace, creo que no es momento para andar visitando muertos, más cuando no se quejan de su soledad.


* Cuji: Avaro, tacaño 
(Diccionario Ñero)

Alberto Buelvas Castro

NO FUE UN SUEÑO

PALENQUE EN LA AMÉRICA

A veces hay cosas que recuerdo y nadie más parece recordar, entonces pienso que las soñé o las imaginé, pero luego insisto en ellas, por eso pregunto y las busco sin ningún resultado.

EL CINE
Seguro si estoy de que hace mucho tiempo, cuando Medellín era un pueblo grande, había pocas  salas de  cine y poco dinero para acceder a ellas. Pero los niños de entonces ni nos enterábamos de eso. Era que solo pensábamos en lo que a los infantes les compete: Jugar, jugar y jugar, bueno y estudiar, aunque lo primero primaba sobre lo segundo.
Al barrio La América se accedía por una larga y estrecha calle, aún llamada San Juan, en cuyo costado sur aún se conservaban los rieles y las torres para las catenarias del antiguo y desaparecido  tranvía municipal, que llegaba hasta San Javier.

Palo de mionas

A lado y lado de la vía había enormes árboles de mango y en las otras calles, arriba de San Juan, unos que nosotros llamábamos “Mionas” y de los cuales aún sobreviven algunos.

Pero volvamos a lo del cine. Vinimos los niños a enterarnos de lo que era el cine gracias a que un día circuló un carro que en ese entonces denominábamos como “Bolas” y que a través de un altavoz pregonaba que esa noche habría cine gratis en la placita de La América, la noticia se regó de tal forma que a las seis y media de la noche no cabía un alfiler en ese sitio. Si mal no recuerdo el patrocinador de esa actividad era Colgate Palmolive, empresa que igual patrocinaba las exitosas radionovelas de entonces.

Como el parquecito estaba muy iluminado un señor subió por una escalera a aflojar los bombillos del alumbrado público para lograr el ambiente de penumbra mínimo para que se viera bien la proyección. Colocaron el proyector sobre la capota del carro y la gente no aguantaba su emoción al ver que pronto darían la película.

Les cuento a los que no les tocó, que en esos años el alumbrado público funcionaba con los tradicionales bombillos (focos) de filamento y pendían de portalámparas que colgaban de las redes de energía que estaban adosadas bajo los alares de las casas.

Ni en una procesión de viernes santo se había visto tal gentío.
Usaron como telón de proyección el gran muro blanqueado de una edificación de bahareque situada en la esquina suroriental de la calle Sn Juan con la 84, era perfecta para ello.

Se escuchó el inconfundible sonido del proyector: Tacatacata…,  al tiempo que salió de él un poderoso haz de luz que como arte de magia comenzó a mostrarnos la película en ese muro. Hubo gritos y aplausos y después completo silencio pues quedamos hipnotizados con las extraordinarias imágenes de una película Mexicana en blanco y negro.

No recuerdo cuando duró esa película, pero sí de que fue un éxito completo, la gente se retiró formando largas filas que iban, unas para el Barrio Cristóbal, otra para La Floresta, otra para El Danubio y San Javier y una para las casa abajo de la placita.
Por mucho tiempo no se habló de otra cosa, que por lo demás fue extraordinaria, si tenemos en cuenta que aún no llegaba la televisión, éramos un mundo de radio.

Y NO FUE UN SUEÑO
¿Pero qué es lo que recuerdo que nadie recuerda?
Resulta que cuando íbamos a regresar a la casa llegó un amigo muy agitado y nos dijo que a pocas calles había visto algo inusual, nos instaba a seguirlo para mostrarnos esa cosa. La verdad confieso que lo desconocido me asustaba casi tanto como la pela que me esperaría si no llegaba a tiempo a la casa.


Como los demás aceptaron sin reparo no tuve más remedio que enlistarme en esa expedición hacia lo desconocido. Así fue que subimos dos calles por la calle 84 y luego doblamos a la izquierda entrando en una zona oscura y totalmente desconocida para mí. Miento si digo que no tenía miedo, pues nunca antes me había alejado tanto de mi casa, comenzamos a escuchar a lo lejos sonidos de tambores  y murmullos de gente. La calle se acababa y de repente entramos a un lugar pantanoso y muy lóbrego, los sonidos nos indicaban que nos acercábamos a lo que eso fuera.
Ya para entonces varios, incluyéndome, comenzamos a inventar disculpas para devolvernos, pero el guía nos animaba asegurándonos que no había ningún peligro.

Luego de cruzar algunos cañaduzales nos topamos con un asentamiento de ranchos a medio hacer,  algunas antorchas ardían sobre pedestales de guadua dándole un aspecto cálido al lugar, caminamos lentamente entre los callejones de aquel insólito rancherío que parecía salido de la nada y mirábamos con disimulo a sus habitantes, todos eran negros, pero negros negros. En la Medellín de entonces nunca los había visto, hombres con el torso descubierto como de ébano, mujeres de ropas coloridas y sonrisas blanquísimas que relucían en la noche, ancianas tejiendo unas pajas gruesas, hablaban todos una lengua muy rara, pero ya no sentía miedo, es más, comencé a sentirme a gusto allí y por la expresión de mis amigos ellos también.
Al pasar frente a un grupo de hombres que cantaban lo que parecía ser una melodía Africana nos invitaron a acompañarlos, aunque no entendimos sus palabras fue claro que deseaban que los acompañáramos un rato. Nos sentamos en una estera y nos dejamos transportar por esa música que ni siquiera imaginábamos, me llamó la atención un hombre que hacía sonar lo que parecían dos cucharas de palo entre sus dedos, era una percusión maravillosa, increíble.

Otro negro tocaba el timbal y todos cantaban. Al ver mi interés por las cucharas ese hombre se me acercó y yo un poco espantado traté de pararme y emprender las de Villadiego, me miró de una forma tan pacífica que resolví quedarme mientras él me ofrecía las cucharas para que las tocara, las tomé mientras me daba unas instrucciones que no entendía y por supuesto no fui capaz ni de agarrarlas adecuadamente y menos de hacerlas sonar con la maestría que el exhibía. El tipo se rió con respeto y continuó su concierto.

Esas personas eran tan amables y acogedoras como nunca antes vi, pero se hacía tarde y corrimos todos a casa temerosos de que nos castigaran por llegar tarde y con los zapatos llenos de lodo.
No hubo castigo, ni pela. Solo una reconvención por habernos expuesto a algún peligro, es que en ese entonces en los lugares oscuros y alejados dizque andaba en las noches “El chupasangre”, el coco de los niños.

Poco tiempo después y ante la incredulidad de nuestras familias tuvimos que llevarlos al lugar donde estaba el raro caserío. Seguimos la ruta que hicimos en esa noche de cine, entramos a los cañaduzales y al atravesarlos solo encontramos una laguna pantanosa, ni un rastro, ni un sonido, nada de nada.

La jalada de oreja y el regaño no se hicieron esperar, habíamos quedado como unos mentirosos. Como quedé tan aburrido con esto no quise marchar al lado de mi familia y me retrasé intencionalmente con mi orgullo herido. Cabizbajo caminaba lentamente mirando como mis viejos zapatos se hundían en el barro, pero inesperadamente vi que flotaba algo que se me hizo familiar, me incliné y lo tomé.  Sorpresa, eran las dos cucharas de madera que me había mostrado el negro. Las guardé con disimulo en mi bolsillo y nunca, hasta ahora, se lo conté a nadie.
A veces cuando voy al campo las llevo y en las noches, en medio de la soledad, las tomo adecuadamente y las hago sonar casi con la maestría de ese negro amable que me invitó a unirme a su grupo de músicos. Es que aunque nadie lo recuerde yo sé que no fue un sueño.

domingo, 1 de septiembre de 2013

miércoles, 28 de agosto de 2013

EL TIBURÓN

Es grato encontrar en la red cosas tan interesantes como las que escribe Alberto López, arquitecto y escritor nacido en Bilbao y ahora habitante de Tarija, Bolivia.

Con un estilo literarario sui géneris nos atrapa con sus relatos al punto de hacernos dudar si lo narrado es realidad o ficción, es por esto que no es raro encontrar comentarios en su página en Facebook de lectores algo preocupados por sus historias. Cuando un escritor logra esto es porque está haciendo muy bien su oficio.


Alberto López ha editado varias obras entre las que destacamos: Cartas de Don Lope, Cabos sueltos, El caimán y Los Vascos en el Alto Perú. Igualmente sigue compartiendo con los seguidores de su perfil textos que surgen de su imaginación sin límite que nunca dejan de sorprendernos.

Muchas gracias Alberto por habernos autorizado la publicación de este estupendo relato.

EL TIBURÓN


Cerca de mi casa, hay una pequeña caleta a la que no hay otra manera de acceder, que a través del mar. Yo solía ir nadando desde el punto accesible más próximo de la costa, lo que viene a ser una distancia de unos cincuenta metros. Casi nunca había nadie. En ocasiones atracaba algún velero, que después de un baño y un rato de descanso volvía a zarpar.

 Me había preparado un saquito impermeable, flotante, como si fuera un salvavidas, con un libro, un cuaderno de notas, el bolígrafo y la toalla. Las aguas eran tan transparentes en aquel lugar, que con unas simples gafas de buceo, se disfrutaba de un espectáculo único. Era un mundo submarino cristalino y lleno de vida, donde habitaban infinitos peces en una inacabable pradera de posidonia. La soledad en la cala, cuando no había nadie, era como encontrarse con el significado profundo del Mediterráneo.

 Este es un mar donde no hay grandes peces, como en la costa atlántica de mi adolescencia. Bueno, eso creía yo. Porque un día salí espantado corriendo del agua, al adivinar a poco más de quince metros, la silueta de un pez enorme, que aunque no vi su aleta dorsal que lo identifica, supuse que se trataba de un tiburón o algo parecido.

Me dio un buen susto. Estuve un buen rato oteando desde la orilla en busca de la fiera, pero no vi nada. Así que me fui tranquilizando y convenciéndome a mí mismo que, quizás me había equivocado y solo había sido una sombra. Y es que me parecía imposible que un bicho así pudiera encontrarse por aquellos lugares de la costa.

 Había pasado una semana y ya tenía el susto olvidado, cuando el animal volvió a aparecer, cruzando de parte a parte la cala, a una distancia más cercana a la orilla. Una gran cola de lo que sin duda era un pez enorme, aleteaba sacando gran cantidad de espuma, avanzando y girando a gran velocidad. Pensé… ¿será un delfín?

 Aunque en los días siguientes volví a la caleta, ya no me atrevía a bañarme. Leía, escribía y paseaba por la orilla, pero nada más.

En las jornadas siguientes el escualo o le que aquella cosa fuera, comenzó a presentarse puntualmente, coincidiendo con mi horario de llegada. Paralelamente a la playa, iba y venía una y otra vez, acercándose a la orilla paulatinamente, cada vez más de día en día.


Empecé a llevar unos prismáticos para observarlo mejor, pero nunca conseguí ver más allá de la espuma que levantaba y el remolino que generaba al avanzar en las aguas. Tuve la sensación que, aquel animal se sabía observado y que se había adaptado a la presencia del ser humano. Pero resultaba curioso, que cuando en la caleta había alguien más (en general, alguna joven pareja de enamorados en busca de intimidad) el escualo no aparecía.

 Cierto día que llegue una hora antes de lo que tenía por costumbre, me sorprendí al ver que, a unos treinta metros mar adentro, se encontraba una mujer bañándose. En la playa no había nada, ni ropa, ni toalla, ni ninguna otra cosa que delatara la presencia de gente, y en el mar tampoco había yate alguno. Supuse, por su manera de nadar, que quizás se trataba de una nadadora bien entrenada que, habría llegado nadando desde algún punto de la costa o de alguna embarcación de recreo que estaría tapada tras un recodo o anclada en alguna caleta próxima.

Me tumbe en la arena y me puse a leer una vez más el Makrol El Gaviero, de mi admirado Alvaro Mutis. Cuando me pareció oír un cierto aleteo mezclado con el ir y venir de las olas cerca de la orilla, levante la vista y descubrí a la mujer más bella que jamás había visto en mi vida. Me quedé como obnubilado. Entonces ella, que no paraba de nadar lentamente con una elegancia para mí desconocida, con medio cuerpo fuera y unos pechos perfectos, me hizo una señal para que me acercara a la orilla.

Estuvimos charlando un buen rato, yo parado en junto al agua y ella a cuatro o cinco metros dentro, sin parar de nadar lentamente. Le invite a salir, para seguir nuestra conversación sentados cómodamente sobre la toalla, pero declinó mi invitación. Entonces di dos pasos hacia el mar y descubrí su secreto…era una sirena…si una sirena de verdad, que charlaba animadamente y estaba al corriente de lo que sucedía en el mundo.

 No sé cómo fue, pero tomé aquella situación, como la cosa más normal del mundo. Desde entonces, comencé a bajar todos los días sin falta a la caleta, incluso con la comida y pasaba el día entero desde casi el alba hasta el anochecer. Y me enamoré perdidamente…y ella también.

Cuando entre los besos y caricias en el agua, a unos pocos metros de la orilla, ella dejó deslizar su cola como si fuera una falda, lo hizo con una sensualidad, que yo no había visto en mi vida. Aquella primera noche memorable, la pasamos en el mar haciendo el amor. Ahora tenemos dos sirenitas preciosas de diez y cinco años, con los mismos ojos del color azul Mediterráneo y los mismos cabellos dorados de su madre.

A una la llamamos Sirena Virginia y a la otra Sirena Valeria.

Vendí mi casa, y conseguí comprar un gran terreno que abrazaba toda la caleta, donde a su vez construí una casa junto al mar. Y allí me fui a vivir, para estar más cerca de mi familia. Y allí sigo. Mi casa está llena de conchas a cual más bella. Son los regalos que día tras día, desde lo más profundo del mar me traen mis pequeñas sirenas.

Tengo sesenta y seis años, he envejecido, pero sin embargo por mi sirena madre no pasan los años. Dicen los antiguos mitos griegos, que cuando llegan a la treintena ya no envejecen más. Mis pequeñas siguen creciendo felices, sanas, bellas y fuertes. Siempre he pensado y aceptado que de manera natural, nacemos para morir. Pero ahora pienso que es una gran injusticia, pasar toda una vida intentando aprender a ser feliz y cuando tocamos la felicidad con la punta de los dedos, nos llega la muerte.

Llevamos diez años juntos si separarnos. Nunca le he preguntado por su vida anterior. Sé que en han debido haber muchos hombres y que después de mi los habrá más. Es el sino de las sirenas, enamorar y hacer felices a los hombres. Algunos me preguntarían ¿no sientes celos?...Como voy a sentir celos de ello, respondería, si no hay labor más generosa en la vida que el proporcionar amor. Si acaso tendría que sentirme orgulloso de ello.

Por eso cuando los humanos contaminamos la costa y el mar, con vertidos industriales y urbanos, o como cuando vertemos cantidades ingentes de petróleo en accidentes como el del Prestige, me hecho a temblar pensando en mis sirenitas.

Me contaba mi sirena esposa que, el Mediterráneo, donde los mitos antiguos situaban el nacimiento de las sirenas, la vida, por la contaminación, cada vez resulta más difícil y van quedando menos. Los pescadores de altura, a los que antes ofrecían sus cantos, ya casi no existen, por eso tienen que acercarse a la costa, para buscar a sus hombres con el peligro que ello conlleva. El futuro de nosotras – me dijo en una ocasión – está condenado a una más pronta que lejana extinción…tus hijas van a ser de las últimas.

En las noches de verano, salgo a la terraza de mi casa que se asoma al mar, y me tumbo a dormir plácidamente sobre una hamaca, acompañado por las voces de mis tres sirenas, que me arrullan desde la costa con las mismas canciones que, hace siglos, cuando el mar Mediterráneo estaba al cuidado de los dioses, arrullaban a Ulises.

Alberto López

HORÓSCOPO GRACIOSO

Aunque no soy adicto a leer horóscopos de revistas y diarios, luego de leer un correo que me envió mi amigo Juan desde Buenos Aires que me hizo reir un rato se me ocurrió meter el texto en un formato semejante al que sacan en los periódicos. El resultado es este que hoy les comparto y que espero que los divierta.

¿CUANTAS PERSONAS DE CADA SIGNO
SE NECESITAN PARA CAMBIAR UN BOMBILLO?

 
Click sobre la imágen para ampliarla

miércoles, 14 de agosto de 2013

EL INSOMNE


Solo quienes hayan sufrido un episodio de insomnio sabrán el sufrimiento que genera este mal que cada vez afecta a mayor número de personas.

Contrario a otros males, quien lo padece aparenta estar en perfectas condiciones físicas por lo que casi nadie en su entorno le presta atención ni le cree su historia y encima lo tildan de hipocondríaco o mentiroso.

Eso no puede ser, una persona que no duerme en una semana estaría loca, y vos te ves muy bien”.
 
Es que no imaginan el infierno que viven cada noche estos desdichados  que por más que lo intentan no logran conciliar el sueño, mientras que el resto del mundo duerme a pierna suelta.

EL INSOMNE

Camina en las noches como alma en pena en la habitación describiendo una ruta circular que se acomoda a la medida de esta. Sale del cuarto rumbo a la cocina buscando la panacea en un vaso de leche tibia. Ya lo ha intentado casi todo: infusiones de valeriana, lechuga, toronjil, azahar, manzanilla, salvia y toronjil, una ramita de yerbabuena bajo la almohada, baños tibios.

Todo esto sin ningún resultado distinto que al de entretenerse un poco mientras elabora las recetas,  envolatando así  un poco el paso del tiempo.

Claro que no le faltó el intento de convocar a Morfeo escuchando la música de Bach: “Suites para violonchelo” y las recomendadas melodías de la música New Age, que según muchos  han demostrado muy buenos resultados, pero para esos otros muchos, no para nuestro insomne. No consiguió nunca quedarse dormido al son de las melodías clásicas pero al menos se volvió un experto en ellas.

Nadie sabe lo desconsolador que era para el insomne contemplar a los demás durmiendo plácidamente en sus noches de obligada vigilia, a veces hasta imaginaba sus sueños oníricos y sentía envidia, mucha envidia.

Como ya no eran semanas sino meses decidió leer los cuentos de Edgar Allan Poe en los que descubrió un fascinante personaje, Aguste Dupin, develando casos policíacos casi imposibles y convirtiéndose en el precursor de Sherlock Holmes.

En las horas del amanecer  descubrió el tic tac del reloj de pared, que en el resto de las horas diurnas  parece mudo. Tic, tac, tic, tac…

El sexto mes de su desvelo lo sorprendió inmerso en la obra de Borges y a través de sus “Ficciones”  pudo ingresar a la biblioteca Babel con sus galerías hexagonales con infinitas salas llenas de incontables combinaciones de palabras en las que lo normal era la incoherencia y lo racional una milagrosa excepción. Tic, tac, tic, tac…

Nuestro amigo insomne descubrió una noche que estaba solo en su agonía, que nadie estaba dispuesto a sacrificar un pedacito de su sueño para acompañarlo y transformar su monólogo nocturno en un pequeño diálogo que le hiciera más llevadera su situación por unos minutos. Pero eso ya no le importaba pues había descubierto que él mismo era buena compañía y que sus monólogos habían mejorado mucho.

Había ya transcurrido un año y al fin había descubierto la paciencia, una escasa virtud que le permitió comprender que todo pasaría y que un día cualquiera se sorprendería despertando de su anhelado sueño.

Muchos libros tuvieron que pasar por sus manos, muchas infusiones y vasos de leche tibia, montones de yerbas recomendadas arrumadas bajo su almohada, incontables caminadas circulares en su cuarto, montones de temas musicales sonados en su reproductor, muchos llantos, muchas angustias y desesperanzas, ahí estaba en ese aniversario de su insomnio el insomne, solo, tirado boca arriba en su cama, esperando su regalo de aniversario, mirando las aspas del ventilador girando como una galaxia lejana, lejana y cada vez más lejana, y el reloj acompañándolo con su percusión monótona, con su tic, tac, tic, tac, tic, tac

viernes, 9 de agosto de 2013

ASTROPUERTA AGOSTO 2013

Hola:

1. El evento del mes es la observación de la Lluvia de Meteoros de las Perseidas, agosto 10, 11 y 12. Astroseneca de Uniandinos organiza un campamento de observación el sábado 10. Informes e inscripciones en el Tel 6162211 Bogotá y en el Correo:
capítulos1@uniandinos.org.co

2. La actividad del mes es el XIV ENCUENTRO DE LA RED DE ASTRONOMIA DE COLOMBIA, RAC, en Ibagué, Agosto 17 a 19. Organiza la Asociación Urania-Scorpius

Más información en:
 Mauricio Chacón      mchacon@colombia.com mchacon@colombia.com      311- 575 3846

3. La Astronomía para Niños del mes es el sábado 3 de agosto en la Escuela Artística TIERRA DE SUEÑOS. Informes e inscripciones en los Tel. 810 7469 y 221 0480 en Bogotá. Cel 315 2966542. astronomykidsclub.co@gmail.com

En seguida los eventos del mes.

Saludos

Germán Puerta

www.astropuerta.com.co
cel 315-3473859
Bogotá, Colombia
@astropuerta


1. Principales eventos celestes de Agosto 2013

Domingo 4 - Oposición del asteroide Juno

Martes 6 - Luna nueva

Domingo 11 - Lluvia de meteoros de las Perseidas

Lunes 12 - Ocultación de Spica por la Luna visible en Asia

Miércoles 14 - Luna en cuarto creciente

Miércoles 21 - Luna llena

Martes 27 - Oposición de Neptuno

Miércoles 28 - Luna en cuarto menguante


2. Principales efemérides históricas de Agosto 2013

Lunes 5 - 1930: Nace Neil Armstrong, primer hombre en la Luna

Miércoles 7 - 1959: El satélite Explorer 6 envía la primera imagen de la  Tierra vista desde el espacio

Domingo 11 - 1877: El astrónomo Asaph Hall descubre a Deimos, luna de Marte

Martes 13 - 1672: El astrónomo holandés Christiaan Huygens descubre los casquetes polares de Marte

Sábado 17 - 1877: Asaph Hall descubre a Phobos, luna de Marte

Martes 20 - 1803: Se termina la construcción del Observatorio Astronómico de Bogotá, el más antiguo de América

Viernes 24 - 1989: La nave Voyager 2 envía las primeras imágenes cercanas del planeta Neptuno

2006: Plutón es reclasificado como Planeta Enano por la Unión Astronómica Internacional

Sábado 25 - 2009: Corea del Sur lanza su primer satélite artificial

Martes 28 - 1789: William Herschel descubre a Enceladus,  luna de Saturno


martes, 6 de agosto de 2013

CRÓNICAS DE AUTOBÚS

LA SONRISA DE FREUD

Les traigo un bloguero invitado que nos sorprende cada vez que pega sus escritos. Y no es para menos, pues su trabajo como periodista lo mantiene en contacto con realidades que pueden pasar desapercibidas para el común de la gente. Prueba de esto es el texto que hoy nos comparte.

Azury Chamah Furman (Medellín, 1969) Comunicador social - Periodista de la Universidad Jorge Tadeo Lozano de Bogotá. Corresponsal permanente de W Radio en Oriente Medio desde junio de 2010. Ha laborado también en Todelar, Señal Colombia, Teleantioquia y el desaparecido diario La Prensa, entre otros. Reside en Tel Aviv, Israel, desde 2007 y actualmente completa estudios de cine documental.
"Alguien me enseñó una vez que la vida es como un autobús, o la tomas o la ves pasar. Luego descubrí algo más. Tomar el autobus es una forma de ver pasar la vida. Adentro, tu mundo. Afuera, el mundo. Si quieres hacer parte de él, oprimes un botón y te bajas. Si no lo haces, poco cambia".

Introducción

Alguien me enseñó una vez que la vida es como un autobús, o la tomas o la ves pasar. Luego descubrí algo más. Tomar el autobus es una forma de ver pasar la vida. Adentro, tu mundo. Afuera, el mundo. Si quieres hacer parte de él, oprimes un botón y te bajas. Si no lo haces, poco cambia.

Desde que vivo en Tel Aviv, mi cámara de video viaja conmigo. O quizás soy yo quien viaja con ella. Hoy, Tras varias estaciones, se me ocurrió una frase que haría sonreir a Freud: "Ten cuidado con lo que miras por la ventana, en una de esas podrías encontrarte". Para comprobarlo oprimí los dos botones, el del autobús y el de la cámara.

Ten cuidado con lo que miras

El primer muerto de mi vida quedó sobre el pavimento de la Autopista Norte entre Medellín y Bello. Ese día era mi turno de ventana, serio compromiso pactado con mis compañeros de silla Sarita y Mauricio.

Pubenza, maestra responsable de la ruta del autobús, gritó lo correcto: "Niños, no miren, no miren eso". El tráfico era lento y teníamos emociones cruzadas. Por un lado el delicioso protagonismo que nos daría llegar tarde al colegio, por otro, la impresionante escena matutina del hombre atropellado por otro autobús.

Isaac fue el primero en arriesgarse a correr la suerte de la mujer de Lot. Miró y, en un claro desafío para que todos volteáramos, expresó: "aayyyyjuemadreee".

Yo también miré. Y anunque no logré dormir un par de noches, valió la pena. El resto del día gocé del privilegio de pertenecer al grupo de los valientes que describían la escena a los débiles.

Más de treinta años después de mi primer muerto, aún siento fascinación por ese íntimo arte de mirar a través de la ventana del autobús. Cuando no logro la ventana, me deleito en silencio con lo que sucede adentro. Juego a adivinar los pensamientos de los demás pasajeros, intento adivinar en cuál estación se bajarán.

En mi maletín llevo como amuleto la cámara de video que me obsequió mi hermana Liza. La enciendo y me robo piadosamente algunas de las escenas que parecen estar incluidas en el valor que pago por el viaje.

Hoy, tras varias estaciones, se me ocurrió una frase que haría sonreir a Freud: "Ten cuidado con lo que miras por la ventana, en una de esas podrías encontrarte". Para comprobarlo oprimí los dos botones, el del autobús y el de la cámara.
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Gracias Azury por compartirnos tu escrito.


martes, 30 de julio de 2013

LAS COSAS PERDIDAS

Si deseas que tus sueños se hagan realidad, ¡despierta!. (Ambrose Bierce)
Leyendo un escrito de Eloy Moreno, autor del libro El bolígrafo de gel verde, me encontré un texto que a todas luces parece ser universal, habla de los pequeños objetos que de repente desaparecen en la casa, como escondidos por algún misterioso gnomo o absorbidos hacia alguna dimensión desconocida. El autor enumera algunas cosas que encontró al mover el sofá: “Objetos o personas que ya había olvidado, un calcetín que se quedó sin pareja o una pareja a la espera, y a veces secretos que te obligan a decir: Tenemos que hablar.”

Así es que no solo desaparecen los objetos, también se ocultan algunos recuerdos que por algún motivo elegimos olvidar pero que inevitablemente de cuando en cuando resurgen con más ímpetu haciéndonos pedazos el corazón, amores perdidos, amores no declarados y la infaltable procastinación, terrible enemiga de todos esos sueños y anhelos  que nunca se realizan, gracias al:”Mañana lo hago”.

Todo este cuento surgió después de que moví la lavadora de mi casa, una vieja máquina que contrario a las de ahora pesa una tonelada. No sin mucho esfuerzo logré desplazarla a jalones hasta dejar descubierto el espacio que ocupó desde que la instalamos, hace unos veinte años más o menos, tirando a más.

Y que sorpresa,ahí estaban algunas de esas cosas desaparecidas, un calcetín negro, de un par que solo usé una vez, algunas monedas que rodaron algún día y que entonces inexplicablemente nunca hallé, el pequeño muñequito de goma que Carito perdió hace cinco años y por el que lloró dos días, una pinza de pelo quién sabe de quién, una fruta de mamoncillo arrugada por los años, una cucaracha disecada, un pequeño adorno de navidad. Cuantas cosas extraviadas por tanto tiempo yaciendo en el mundo del olvido.

Igual a veces pasa que al escuchar una vieja canción se corre el velo del olvido y salen a flote momentos que impactaron nuestra vida. Julio Jaramillo canta algunas de esas canciones que esculcan el alma: “Desde que te marchaste dormir casi no puedo,  hay noches que despierto con ansias de llorar, sueño con tantas cosas que infunden tanto miedo,  que prefiero la muerte a dolor de esperar”.

O la de Willie Colón: "Cuanto me cuesta dejarte, hoy que se cumple la historia, dicen que voy a olvidarte, yo se que olvidarte es mi derrota. Para olvidarte requiero, perder todas mis memorias, y comenzar desde cero a respirar el aire que te sobra".

Es que bajo esa lavadora estaban los retazos perdidos de la vida, los amores idos, los amigos que no están, los trabajos fallidos, los momentos ingratos de nuestra existencia, todas esas cosas que preferimos mantener ocultas a nuestra conciencia para que no sean un lastre y nos permitan seguir el camino con un equipaje más liviano.

Pero es inevitable o tal vez hasta recomendable abrir la tapa de esa caja de Pandora ocasionalmente y sentarnos un rato a mirar todo aquello que contiene, para limpiarle el polvo y comprender que todo sucedió por algún motivo.

"El olvido está lleno de memoria"
Mario Benedetti

jueves, 25 de julio de 2013

NECESITAMOS SANTOS

Jorge Mario Bergoglio nuevo Papa de la Iglesia Católica le está dando un aire nuevo a una institución anquilosada en el oropel y algo distante de su pueblo, esta nueva sangre latina que ahora recibe como una transfusión salvadora el Vaticano nos llena de esperanza, y no es para menos dadas las cualidades de este hombre que es ante todo eso: Un hombre.

Bajándose de ese pedestal que hacía a los papas seres casi sobrenaturales, Francisco ha dado increíbles muestras de humildad y se identifica con la gente común y corriente. Sus mensajes son claros y acordes a esta época que vivimos, por eso logran sintonía tanto con los jóvenes como con los adultos. Es un hombre que irradia alegría y que no teme sonreir, que atrae y atrapa a sus interlocutores con su familiaridad.

Fue así que en el marco de la jornada mundial de la juventud incluyó en su alocución el fragmento de un texto atribuído inicialmente a Juan Pablo ll pero del que también antes se había dado a la madre Teresa como autora, en conclusión no es claro quien es el autor del texto, pero eso no le quita su poder de exhortación.



NECESITAMOS SANTOS

Necesitamos santos sin velo, ni sotana. Necesitamos santos con jeans y tenis.

Necesitamos santos que vayan al cine, que escuchen música, que caminen con sus amigos.

Necesitamos santos que coloquen a Dios en primer lugar y que sean lanzados en sus universidades.

Necesitamos santos que tengan tiempo diario para la oración y que sepan enamorarse de la pureza y la castidad o que se consagren a su castidad.

Necesitamos santos modernos, santos del siglo XXI. Necesitamos santos comprometidos con los pobres y con los necesarios cambios sociales.

Necesitamos santos que vivan en el mundo, que se santifiquen en el mundo, que no tengan miedo de vivir en el mundo.

Necesitamos santos que tomen Coca Cola y coman pizza, que usen tenis, que sean actuales.

Necesitamos santos que amen apasionadamente la Eucaristía y que no tengan vergüenza de tomar una cerveza o comer una hamburguesa un fin de semana con los amigos.

Necesitamos santos sociables, abiertos, normales, amables, alegres, compañeros, amigos.

Necesitamos santos que estén en el mundo y que sepan saborear las cosas puras, buenas y no las mundanas.

martes, 23 de julio de 2013

LAS REDES DE LAS REDES SOCIALES

Sin duda las redes sociales nos atrapan con sus fascinantes hilos y espectaculares opciones de comunicación inmediata, además de ser gratuitas, innegable valor agregado.

Poder interactuar con nuestra familia y amigos sin importar el lugar en que se encuentren era algo impensable hace pocos años, el futuro está aquí.


Medio en serio y medio en broma voy a contarles algunas curiosidades  surgidas de mi propia experiencia.

Motivos para que te acepten o eliminen de un perfil o grupo.

Empecemos por analizar los motivos que impulsan a alguien a buscarte como “Amigo”, a aceptar tu solicitud o viceversa.

1. Son amigos en la vida real.
2. Eres amigo de alguno de sus amigos.
3. Te desempeñas en una actividad que causa su interés.
4. No eres su amigo en la vida real, amigo de sus amigos, ni amigo de sus amigos y le importa un comino la actividad a la que te dedicas, Solo quiere llenar su caja de “Amigos” para competir y tratar de ser el que más tiene.

Vemos personas comunes y corrientes con miles de amigos, con todo respeto eso se ve normal en los perfiles de Shakira o de Tom Cruise, pero en un simple mortal eso acusa grave sospecha de algún desorden mental. Fotos de perfil de chicas con prendas íntimas, chicos y no tan chicos sin camisa, de brazos cruzados y con mirada de malosos, en fin es el zoológico de las redes sociales, ese del que quiera o no yo también hago parte y de seguro igual ocuparé algún lugar en su clasificación taxonómica.

Es que las redes sociales son el mundo real comprimido en código binario.

Sobre los motivos que impulsan a la gente a abrir una cuenta en una o en varias redes son tan variados que llenarían una enciclopedia.

A veces personas solitarias y tímidas encuentran más fácil socializar virtualmente. Otras buscan llenar los vacíos afectivos y emocionales causados por una vida solitaria, sin vínculos sociales o familiares. Algunos lo harán para tratar de sobresalir y ocultar su pobreza*, para enseñar más su tener que su ser, para mostrar sus autos, sus mansiones, su viajes alrededor del mundo, sus perros con pedigreé, *“Ese hombre es tan pobre que lo único que tiene es plata”.

Claro que este caso se revalúa cuando se comparte con un círculo pequeño de familiares y amigos íntimos y obviamente su propósito no es necesariamente alardear.

Un grupo numeroso sin duda es el de las chicas que sueñan con encontrar su príncipe azul y que casi siempre solo hallan chicos en busca de una aventura de fin de semana.

Muchos sin duda serán los que usan la red social para estar cerca de su familia, de sus verdaderos amigos, de sus amores y de sus intereses científicos y culturales.

LLEGA TWITTER

Olvidaba lo de Twitter, la red de los mandatarios del mundo, de los intelectuales y de los filósofos.

Aún no me acomodo a estar limitado a textos tan cortos, 140 caracteres, incluyendo espacios. Allí me siento como escribiendo avisos clasificados o telegramas: "Auto modelo 2008 único dueño vendo" - “Próx martes ir finca, sacar bestias camino”.

O el célebre telegrama de Dolores Santa cuando en un viaje a Dabeiba el carro de escalera en el que iba sufrió un accidente, entonces ella fue cojeando a la oficina de telégrafos en Cañasgordas y envió este mensaje a su familia, “Varóse chiva, reventóse llanta, quebróse culo, Dolorita Santa.” Este fue un célebre trino adelantado a su tiempo.

En Facebook en cambio me siento como orador de pueblo en la plaza un domingo de mercado, donde puedo echar discursos como este, o será que soy muy montañero.